... de la entrevista a Antonio López en el XL Semanal:
"...
XL. Su mujer, María Moreno, es pintora, ¿le critica?
A.L. Mari es muy guapa, tiene mucha belleza y mucho encanto. Nos hemos llevado siempre muy bien..."
Leyendo estas cosas, una se da cuenta de que las mujeres de uno tendrían que ser siempre guapas, de veras. Más incluso que los amigos, que ya es decir. Debería estar prohibido que las mujeres feas tuvieran maridos, así de sencillo. Cuando una mujer es fea, lo mejor que puede hacer es asumirlo y dejar al marido en paz, con su vida, sus alegrías y sus cosas y, quizá, con sus nuevos amores y sus nuevas mujeres guapas y encantadoras. Y ella, pues a lo propio también: a ponerse guapa y a sacar ese encanto que no ha sabido desarrollar a lo largo de su vida de eternafeadedicada, o a aprovechar la soledad si lo que pretende es seguir siendo fea/feísima el resto de sus días, que también es otra opción.
Pero... si te lo encuentras... ¿cómo no te vas a enamorar de este hombre? Tendrías que ser muy fea muy fea y muy poco lista. Pongámonos que somos heterosexuales, que se me olvidaba. ¿He dicho heterosexuales, verdad? que es que siempre me armo lío con estas palabras.
(Dedicado a H., que ya sabeís que fue el primero en darme la idea de los amigos guapos, pero también... a unas cuantas)
3 comentarios:
Mira, los amigos siempre guapos, y los conocidos también, porque feos ya te encuentras sin buscarlos.
(Aclaración terminológica : guapos y feos por dentro, que por fuera ya los vemos de lejos.)
Besitos cordobeses
Muchas gracias por la dedicatoria, Marideliwes, me doy por aludido. Que le quería preguntar si luego Antonio López dice que si su mujer pinta bien o mal o así o asá o lo deja en lo guapa que es, que eso tampoco es de recibo.
Ah, pues de eso ya no dice nada. Espere, espere, que sí, que creo recordar que decía algo así como que él era el que tenía más éxito en este sentido y que llevaba "un poco la voz cantante" en este sentido y que se alegraba. Supongo que se alegraba él y... ella, ah, pues supongo que también estará contenta de tener un marido tan exitoso, porque si lo quiere también tendrá que alegrarse, se supone. Pero que la entrevista se la hacen a él, Harry, que si ella hubiera sido la existosa ya se lo hubieran peguntado a ella y entonces ella hubiera dicho: "Antonio es muy guapo, tiene mucha belleza y mucho encanto. Nos hemos llevado siempre muy bien. A mí me parece una ventaja que también él sea pintor y está muy contento de que yo tenga más éxitos, de que yo tenga un poco la voz cantante en ese sentido." En fin, en menudo lío acabamos de meter a Antonio... a nuestro Antonio imaginario, claro, porque me da a mi que Antonio, si de verdad la quería y no quería convertir su vida en un calvario, hace tiempo que hubiera colgado los bártulos de pintor y se hubiera hecho... arquitecto, por ejemplo, o mejor, político, o... no se, seguramente la Mari hace tiempo que hubiera dejado de ser una mujer tan bella y con tanto encanto, que el éxito a las mujeres nos afea mucho y andaría un poco loca buscando por ahí chicos jóvenes que la quisieran aunque solo fuera por sus éxitos pasados... no sé, en menudo lío se acaban de meter nuestro Antonio y nuestra Mari por no dejar en paz las cosas en su sitio :-)
Gracias, don Harry.
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