miércoles, 18 de junio de 2008

40 de Mayo, aquel 2008

Sale el sol en Zaragoza. Por fin podemos volver a tender fuera. Habíamos olvidado el olor de la ropa.

1 comentario:

marideliwes dijo...

De la ropa cuando se seca al sol, se entiende :-), frente a la ropa que ha tenido que secarse dentro de las casas, la que finaliza su proceso de secado sin tiempo, en función de lo que estorbe a unos personajes que han sobrellevado un día lluvioso, triste. Ropa tendida por los radiadores cuando estos ya no se encienden, ropa demasiado grande o pesada que nunca se secará del todo y que acabará planchada y recogida y, finalmente, en la lavadora el día que volvemos a recoger, ahora si, otra ropa que se ha secado al sol.