miércoles, 25 de junio de 2008

Entre las clases y el campamento

Levantarse triste, sin una razón concreta ¿Cómo cambiamos el día? Estoy leyendo El corazón es un cazador solitario, de Carson McCullers. O intentándolo, por segunda vez. De la primera no recordamos nada: nada interesante, queremos decir, nada que nos apasionara o que nos ayudara a cambiar un día en el que, sin razón concreta, amanecemos tristes. Seguimos sin superar la maternidad, sin saber muy bien que hacer con ella.

miércoles, 18 de junio de 2008

40 de Mayo, aquel 2008

Sale el sol en Zaragoza. Por fin podemos volver a tender fuera. Habíamos olvidado el olor de la ropa.

martes, 17 de junio de 2008

Por cierto...

... que a mi pueblo le han dado un premio. O a Arabarri, por su plan de conservación de la muralla. Por habitada.

Muralla habitada. Qué bonito.

miércoles, 11 de junio de 2008

Querida anónima:

En mi vida me hubiera imaginado que eras tú la del comentario. Quizá esta chica también te guste, es de otro tiempo.

lunes, 9 de junio de 2008

Días como de ahorro

Hoy, Día de la Rioja, en mañilandia nos levantamos sin agua en los grifos (o canillas, que decíamos en nuestro particular paraíso). Últimamente estamos tan hechos a que los elementos nos sean los contrarios que ni siquiera nos enfadamos. Sacamos una botella de agua mineral y nos lavamos como los gatos. A 120 por la autopista: no se puede tener todo en este mundo. Por supuesto, el día, también nos lo podíamos haber ahorrado.

domingo, 1 de junio de 2008

Lecturas. Donde lo dejamos.

* Seguimos durante algún tiempo con Doris Lessing. El último, que ya no recordamos, lo dejamos a medio leer.

* Comenzamos con Tolstoi: Ana Karenina. Nos gustó, nos encantó todo menos el final. El final nos pareció una mierda. Devolver a Nieves.

* Volvimos a Dostoievski: El Jugador Cuando el Capitán nos pase el Idiota, daremos un descanso a los rusos y los guardaremos en un lugar especial, compartido.

* Rafael Azcona. Leímos lo primero que cayó en nuestras manos: Pobre, Paralítico y Muerto nos gustó. Memorias de un señor bajito lo dejamos sin acabar.

* En medio, Benedetti. no sé. Vivir adrede y Nuevo rincón de haikus. Bedetti nos gusta casi siempre, por eso debemos volver mucho.

* La Voz Dormida, de Dulce Chacón y El Tiempo Escondido, de Joaquín M. Barrero. Grandes historias. Hermosas.

* Nos lanzamos a la novela negra. de la que tampoco habíamos leído nada, o muy poco. Nos toca un sueco: Leif GW Persson, Otro tiempo, otra vida. Me encanta el título y la historia no está mal, los diálogos, los pensamientos mezclados en las conversaciones... pero quizá hayan sido demasiadas páginas para alguien que lee tan despacio.

Hoy me siento un poco huérfana, porque no tengo ningún libro esperándome, que yo recuerde; o que yo crea recordar que espero leer. Mañana vuelve a ser lunes.

Se ve, se ve